La cirugía ortognática
La cirugía ortognática ,es un proceso quirúrgico que corrige problemas en la alineación de los huesos maxilares y la mandíbula mejorando tanto la función como la estética facial. Se realiza para tratar maloclusiones (mordida incorrecta) que no pueden ser corregidas solo con ortodoncia.
¿En qué consiste la cirugía ortognática?
La cirugía ortognática implica mover los huesos maxilares y la mandíbula a sus posiciones correctas para lograr una oclusión (mordida) adecuada y una armonía facial. Los cirujanos maxilofaciales son los especialistas encargados de realizar este tipo de cirugía.
Función:
Corregir problemas de mordida, masticación, deglución, respiración y habla.
Estética:
Mejorar la apariencia facial, logrando un equilibrio y proporción entre los rasgos faciales.
Salud:
Prevenir problemas a largo plazo en las articulaciones temporomandibulares, dientes y encías.
¿Cuáles son los síntomas que pueden indicar la necesidad de cirugía ortognática?
Maloclusión (dientes que no encajan correctamente).
Dificultad para cerrar los labios por completo.
Problemas respiratorios como apnea del sueño.
Desproporciones faciales (cara larga, corta, estrecha o ancha).
Sonrisa gingival (exposición excesiva de las encías al sonreír).
Perfil facial retraído (mandíbula muy hacia atrás).
1. Evaluación:
El cirujano maxilofacial y el ortodoncista evalúan al paciente para determinar si la cirugía es necesaria y planificar el tratamiento.
2. Ortodoncia:
Se realiza un tratamiento ortodóntico previo para alinear los dientes y preparar la boca para la cirugía.
3. Cirugía:
Se realiza la cirugía para mover los huesos maxilares y la mandíbula a sus posiciones correctas.
4. Ortodoncia postquirúrgica:
Se continúa con ortodoncia después de la cirugía para ajustar la mordida y lograr una oclusión estable.
Cuidados postoperatorios:
Dieta blanda durante las primeras semanas, Higiene oral cuidadosa, Seguimiento con el cirujano y ortodoncista, Recuperación gradual de actividades cotidianas.
La cirugía ortognática es segura en manos expertas, pero como cualquier procedimiento quirúrgico, existen riesgos potenciales, como sangrado, infección o problemas con la cicatrización
